En General Alvear, la Academia y el Naranja igualaron 1-1. Lo que dejó ese encuentro disputado en el vecino departamento, en la nota.
Para mil: es la capacidad del estadio ubicado en avenida Alvear Oeste. El sector oficial tiene una tribuna de media docena de escalones. La parte central le ha comido tres para ubicar otras tantas filas de butacas. En el futuro se piensan agregar más escalones. El estado del campó de juego, bueno.
Dialoguito: dos simpatizantes Albicelestes conversaban respecto de la campaña en el Federal “C”. Para uno “no tendrían que haber echado al técnico” (N. de la R: a Carlos Pérez lo despidieron tras el partido que Argentino perdió con Pilares 4-1 por la 2da fecha). La respuesta del otro fue lacónica: “no tenemos nada”. El primero retrucó: “Sí, pero le empatamos y casi le ganamos a Rincón allá”.
El primero, temprano: antes de los 2′ (exactamente 1’40» según nuestro Crown) Axel Barón marcó su primer gol con la camiseta de Atlético Pilares. Gana con frecuencia el dos en las pelotas paradas. Lástima la expulsión.
El debut del pibe: Cristian Ortubia, de 17 años de edad, es un delantero habilidoso y veloz. Así lo ha demostrado en las inferiores de los Naranja. El minuto trece fue de bautismo futbolero para Cristian a quien Hugo César González mandó a la cancha reemplazando a Neyén Salina. Ortubia, cumplió.
Otra aparición: después de quedarse sin dos defensores (Axel Barón y Cristian Más) ingresó Sebastián Castro para hacer zaga con Víctor Trollán. Hacía mucho que no jugaba y su rendimiento fue satisfactorio.
Hombre al piso: cuando promediaba el complemento y, por las expulsiones y el desgaste, era candidato a salir, Joaquín Carrión salió despedido en procura de una pelota y se llevó puesto al árbitro que cayó. Pese a que se levantó rápidamente, a uno le dio la sensación que el soplapito sintió que lo había atropellado un Tanque.
Sabor a poco: a juzgar por las caras del final, el empate no satisfizo a jugadores y cuerpo técnico Naranja. La consigna, con rima y todo, era “Ganar para clasificar”.
Fotos: gentileza de Denis Rosales.