Hace 23 años, al término de Huracán 2 – Pedal 4, se registró un herido de bala en adyacencias del estadio Azuloro. El supuesto agresor fue encarcelado y luego liberado porque no se presentó denuncia alguna. Fue el episodio más grave de violencia en el fútbol hasta ese momento.
Por Roberto Armando Bravo.