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«El Ángel»

Los mellizos Serpa, Ángel Quiles y Norberto Alonso (River en San Rafael -1986).

Se desarrollaba el apasionante Torneo Regional de 1981 que clasificaría a Huracán al Torneo Nacional. Todos los partidos eran difíciles para el Globo, que había conformado un equipo muy competitivo pero el resto no se quedaba atrás.

La llave que abría a las defensas rivales era el juego de conjunto con la explosividad que daban, en los últimos 25 metros de la cancha, las jugadas generalmente urdidas por Walter Llentilín (armador), continuadas por el Bony Martín  (enganche) y culminadas en la red por el Carozo Ureta (enorme goleador).

Cuando los rivales se cerraban bien, el sanjuanino Jorge Pereyra y el pampeano Víctor Nicollier ganaban por las orillas y sus desbordes y posteriores centros eran una papita para los que llegaban.

1986. River Plate en San Rafael. Los mellizos Serpa, Ángel Quiles y Norberto Alonso.

Pero claro; con el correr de los partidos los rivales se avivaron y neutralizaron, sino de todas, parte de esas armas letales. ¿Y ahora? Con ustedes, «El Ángel Salvador».

Aquel extraordinario relator de fútbol que fue César Robles había advertido que el plan “C” del Azuloro sería el remate de media y larga distancia y, en tal sentido, intuía que Ángel Quiles, de soberbia pegada, iba a darle de lejos cada vez que otros distrajeran marcas.

Así sucedió en cotejos clave (uno, muy cerrado, ante Unión Deportiva de Bowen en General Alvear) y de la creatividad del amigo y colega surgió como corolario de la narración aquello del «Ángel del gol».

Por Roberto Armando Bravo.

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