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Federalismo

Hace 181 años era asesinado el caudillo riojano Facundo Quiroga.

El “Tigre de los llanos” cumplió un papel prominente en la vida política nacional desde 1818. Durante esos 17 años buscó unirse a los que, como él, combatían el centralismo. Su idea era la de convocar a un congreso constituyente para formar la estructura orgánica de una República Federal. En frente tuvo a Juan Manuel de Rosas como el principal opositor.

El Restaurador se negaba argumentando que una organización formal era prematura; las provincias no habían creado aún sus estructuras políticas individuales. Rosas ponía como ejemplo a Estados Unidos que no permitía que un territorio tomase plena participación en la vida política nacional hasta haber formado su propio gobierno. Rosas tuvo el acompañamiento de los grupos dominantes porteños que no estaban dispuestos a compartir las rentas de la aduana con el resto de las provincias.

Mientras la historia nos recuerda de las luchas primeras a favor del federalismo, el presente nos muestra negociaciones entre el gobierno nacional y los gobernadores de provincias en favor de mejorar el reparto de la Coparticipación Federal.

Lo que por ahora no se vislumbra es que el Senado de la Nación respete la Reforma Constitucional de 1994 que le dio mandato para proponer una ley en dos años (1996).

Han pasado veinte años de incumplimiento. El argumento ha sido la falta de “consenso político”. Claro que, en política, los acuerdos no surgen por generación espontánea; simplemente se construyen.

Por Roberto Armando Bravo.

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