En aquellos largos viajes de los integrantes de Cosmodeportes/Antorcha para transmitir fútbol desde distintos lugares de la geografía nacional, a los más jóvenes siempre nos seducía conocer sobre la creación del Autódromo de Las Paredes.
Es que, coincidíamos, era la mayor obra de infraestructura deportiva de San Rafael. De modo que, con frecuencia, consultábamos a Arnoldo Avena, uno de sus fundadores.
Pese a que pasaron muchos años (Arnoldo partió ya hace quince) podemos reconstruir citas, dichos y anécdotas de uno de los protagonistas. Contaba cosas como estas:
– “Ya se había fundado la Asociación Sanrafaelina de Automovilismo (en 1965, en Cosmos Publicidad -Bombal y Alsina-) y fuimos a correr con un Fiat 600 a General Alvear. Lo preparaba (y me acompañó) el Nene José Salinas. No solo nos embalamos en la carrera (que ganamos) sino también a la vuelta, donde nació una idea loca: construir un Autódromo en San Rafael”.
– “Junto a otros muchachos (en principio éramos una docena, al poco tiempo cincuenta) organizamos carreras en el Parque Mariano Moreno. Tras cuatro o cinco competencias juntamos la plata para comprar un terreno detrás del Aeropuerto. Hoy parecería imposible; sucede que encontramos tierras inaptas para la agricultura (en alto- lo que dificultaba el riego- y volcánicas)”.
– “No bien tomamos posesión, comenzamos a trabajar de lunes a lunes, de día y de noche; nos prestaron camiones, topadora, moto niveladora y herramientas varias”.
– “Trabajamos sobre la idea de un circuito pavimentado trabado, con cinco grandes curvas, 2.800 metros de largo en toda su extensión, 14 de ancho, con sus banquinas de 8 metros afirmadas, conformando un ancho total de la pista de 30 metros”.
– “El viernes 4 de agosto nos confirmaron para el domingo 27 la realización de una carrera de Mecánica Argentina Fórmula 1 y 2 con puntaje para el Campeonato Argentino de la especialidad”.
– “Esa misma noche, en la sede de A.S.A. redactamos un comunicado informando: <Hasta el día 23, a las 12, podrán inscribirse los corredores en la Comisión Deportiva Automovilista del A.C.A. (avenida El Libertador 1850, Capital Federal) o en la secretaría de la entidad organizadora, Alsina y Bombal de San Rafael, Mendoza. La pista se habilitará para los entrenamientos los días 24 y 25 (de 15 a 17 horas) y las pruebas de clasificación se realizarán el sábado 26 a partir de las 15. Los premios sumarán $m/n 1.740.000 y serán distribuidos en efectivo así: para primera y segunda serie, al primero $50.000; al segundo $40.000; al tercero $35.000; al cuarto $30.000; al quinto $20.000; al sexto $15.000 y al séptimo $10.000. Para la carrera final $320.000 para el primero; $220.000 para el segundo; $175.000 para el tercero; $125.000 para el cuarto; $90.000 para el quinto; $75.000 para el sexto; $65.000 al séptimo; $55.000 al octavo; $45.000 al noveno y $30.000 al décimo. Asimismo, todos los participantes recibirán en concepto de viático $12 por km. desde su punto de residencia hasta 1.000 Km. y $6 desde esa distancia en adelante. Recibirán también alojamiento sin cargo, piloto y dos mecánicos>”. El comunicado fue firmado por algunos de los fundadores: Arnoldo Avena, José Salinas, Danilo Mora, Roberto Garbín, Alberto Becerra y Enrique Rosemblat.
La carrera
Ante unos 10.000 espectadores ganó la Primera Serie Eduardo Copello y la Segunda Jorge Ternengo que también hizo suya la Final.
Así clasificaron:
Posición/Piloto Auto Tiempo/Diferencia
1° Jorge Ternengo. Bravi/Tornado 32′, 20» 2/10
2° Rolando Sotro. Sotro/Ford a 15» 1/10
3° Nasif Estéfano. Crespi/Tornado a 1′ 31» 8/10
4° Domingo di Santo. Pián/Chevrolet a 1′ 44» 2/10
5° Juan C. Salatino. Pascutti/Dodge a 1 vuelta
6° Orlando Sotro. Sotro/Ford a 1 vuelta
7° Héctor Juan Martino.
8° José Soifer.
9° Oscar Ottonieri.
10° Horacio Schmidt.
11° Juan Tornado.
12° Omar Cubertino.
13° Rodolfo Canal.
14° Fernando Perral.
15° Orlando Moricci.
16° Atilio Caffieri.
Promedio de la carrera: 103,627 Km/h.
Récord de vuelta: Eduardo Copello en la Tercera, con 1′ 29» 3/10, a 112,574 Km/h.
Por lo narrado, está claro que hay más de un motivo para calificar como extraordinaria la construcción del Autódromo de A.S.A. que se cimentó en utopías, imaginación, trabajo y sacrificio en menos de tres años y sin ningún tipo de ayuda gubernamental.
A medio siglo de la inauguración, nuestro reconocimiento para todos aquellos idealistas que se atrevieron a hacer realidad un sueño.
Por Roberto Armando Bravo.