Cuando el fin de semana del 26 y 27 de agosto próximo pasado El Porvenir y La Llave terminaron su participación en el Torneo de la “B”, sus dirigentes calcularon y cayeron en la cuenta que deberían pasar más de siete meses para volver a la competencia.
No fue muy distinto lo de Atuel Norte, El Tropezón y San Luis, que tendrían que esperar siete meses.
Este año se mantendrá la cantidad de diez equipos por la incorporación de Vialidad Nacional (Malargüe) y, supone uno, la participación del Sportivo Balloffet. Si los Cruzados no lo hacen, para algunos el campeonato de ascenso terminará antes que en 2017.
Indudablemente hay un desajuste: la actividad ni siquiera alcanza un semestre.
Para acortar el receso la única alternativa es agregar instancias (partidos para decirlo claramente). Serán los clubes afiliados quienes decidan el cómo. Es eso o seguir quejándose.
¿Y en Primera?
El Parate es de más de cuatro meses. Para algunos es mucho. A diferencia del ascenso, ya no hay etapas por agregar; hacerlo puede llevar al aburrimiento por reiteración.
Para llenar los huecos, tal vez sería oportuno recrear el Torneo Vendimia o Preparación, juntando a los equipos de la “A” y de la “B”.
La duración no debiera superar el mes. Por ejemplo, si comenzara el próximo veinticinco de febrero se podría extender hasta el dieciocho de marzo, una semana antes del inicio de las competencias oficiales.
La forma de disputa podría incluir una Primera Fase con partidos y revanchas para que, al menos, cada equipo haya disputado un par de cotejos. A partir de allí, los cruces serían eliminatorios.
Ese torneo Relámpago posibilitaría los últimos retoques futbolísticos de cara a los campeonatos, algo importante toda vez que vemos que los equipos recién se empiezan a armar en la tercera o cuarta fecha.
Y, para que resulte atractivo, debería otorgar una clasificación (o media) a uno de los torneos reducidos.
Este es el trazo grueso. La dirigencia tiene la capacidad y conocimiento para darle la forma adecuada. Pero que extender el calendario es posible, es posible.
Por Roberto Bravo.
